Después de todo, ¿qué significa estar enamorado si no puedes confiar en una persona?

La confianza, como el arte, nunca proviene de tener todas las respuestas, sino de estar abierto a todas las preguntas.

La confianza ha de darnos la paz. No basta la buena fe, es preciso mostrarla, porque los hombres siempre ven y pocas veces piensan.

Confianza es el sentimiento de poder creer a una persona incluso cuando sabemos que mentiríamos en su lugar.

Nuestro ánimo se inclina a confiar en aquellos a quienes no conocemos por esta razón: porque todavía no nos han traicionado.

La confianza en sí mismo es el primer secreto del éxito.

Se puede confiar en las malas personas, no cambian jamás.

Es imposible ir por la vida sin confiar en nadie; es como estar preso en la peor de las celdas: uno mismo.

La fuerza es confiada por naturaleza. No existe un signo más patente de debilidad que desconfiar instintivamente de todo y de todos.

La mejor forma de averiguar si puedes confiar en alguien es confiar en él.

Confiar en todos es insensato; pero no confiar en nadie es neurótica torpeza.

Nadie que confía en sí, envidia la virtud del otro.

La confianza sirve en las conversaciones más que el ingenio.

¡Confiamos demasiado en los sistemas, y muy poco en los hombres!

La confianza es madre del descuido.

El mayor despeñadero, la confianza.

No es fiéis del que de nadie se fía.

Quien no tiene confianza en el hombre, no tiene ninguna en Dios.

Es una especie de enfermedad natural de los poderosos no poder fiarse de los amigos.

¿Por qué no tener confianza en la justicia del pueblo? ¿Hay en el mundo esperanza mejor o que pueda igualarla?

El que se fía de cualquiera demuestra poca discreción y sensatez: el que de nadie se fía muestra tener todavía menos.

Ninguno de nosotros sabe lo que podría suceder ni siquiera el próximo minuto, pero seguimos adelante. Porque confiamos. Porque tenemos fe.

Si a las personas les gustas, te escucharán, pero si confían en ti, harán negocios contigo.

No me molesta que me hayas mentido, me molesta que a partir de ahora no pueda creerte.

No confíes en las personas que te cuentan los secretos de otras personas.

La forma de desarrollar la confianza en ti mismo es hacer lo que temes y llevar un registro de tus experiencias exitosas.

Se necesitan 20 años para construir una reputación y cinco minutos para arruinarla.

La incapacidad de abrirse a la esperanza es lo que bloquea la confianza, y la confianza bloqueada es la razón de los sueños arruinados.

Cuando la confianza es alta, la comunicación es fácil, instantánea y efectiva.

Ama a todos, confía en unos pocos, no le hagas mal a ninguno.

Mejor confía en el hombre que se equivoca siempre antes que en aquel que nunca duda.

La mayoría de las buenas relaciones se basan en la confianza y el respeto mutuos.

Tener fe es confiar en ti mismo cuando estás en el agua. Cuando nadas no agarras el agua, porque si lo haces te hundirías y te ahogarías. En cambio, te relajas y flotas.

Los cambios de fortuna prueban la fiabilidad de los amigos.

Aquel que no confía lo suficiente no será digno de confianza.

Las personas que tienen problemas de confianza solo necesitan mirarse al espejo. Allí se encontrarán con la persona que más los traicionará.

Vive la vida como si nadie estuviese mirando y exprésate como si todos estuviesen escuchando.

Cumple tus promesas y sé consecuente. Sé el tipo de persona en la que otros puedan confiar.

Puede que te engañen si confías demasiado, pero vivirás en un tormento a menos que no confíes lo suficiente.

El amor no puede vivir donde no hay confianza.

Confía en ti, y sabrás como vivir.

La consistencia es la verdadera base de la confianza. O mantén tus promesas o no las cumplas.

Confiar es difícil. Saber en quién confiar, incluso más.

No confío en las personas que no se aman y me dicen ‘te amo’. Hay un dicho africano que dice: ten cuidado cuando una persona desnuda te ofrezca una camisa.

Confía en tu instinto hasta el final, aunque no puedas darle la razón.

Recuerda que donde esté tu corazón, allí encontrarás tu tesoro.

Debes confiar y creer en la gente, de lo contrario la vida se torna imposible.

Tu desconfianza me inquieta y tu silencio me ofende.

Solo aquellos en quienes confías pueden traicionarte.